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Historia de Gea y Truyols

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Imagen de Gea y Truyols

La denominación compuesta que presenta esta pedanía en la actualidad es fruto de la evolución de su población, que, al igual que la gran mayoría de las pedanías del campo, ha ido disminuyendo en efectivos, lo que ha obligado a unir varias de las antiguas diputaciones o pedanías para poder conformar entidades de población conforme a las condiciones y número de habitantes exigidos por la legislación vigente. El origen de estas denominaciones deviene en su mayoría, tal como resalta Jimenez de Gregorio, de su vinculación a las diferentes familias castellanas, aragonesas y catalanas que recibieron tierras en el campo y que fueron construyendo sus caseríos a los que luego se conocerá por el nombre de sus ocupantes. Por ello su denominación contiene el nombre de uno de los antiguos caseríos, Lo Gea, al que se añadió posteriormente el apellido de una de las familias residentes en la zona, aunque el núcleo principal de población es conocido como La Tercia. Actualmente Gea y Truyols queda conformada en el nomenclator vigente para el término municipal de Murcia por las entidades singulares Lo Gea (con los núcleos de Lo Gea y Pino Doncel) y La Tercia (con los núcleos de la Tercia y Casa del Cura) y El Caracolero.

La historia de Gea y Truyols no varía de las del resto de caseríos, lugares y posteriores diputaciones del campo, cuyo devenir está íntimamente ligado a las características geográficas y climatológicas, que hacen de esta zona un lugar ingrato por la falta de lluvias e inseguro por las continuas razzias y posteriores ataques de los piratas berberíscos. El campo murciano fue desde su incorporación al reino de Castilla la natural zona de expansión de Murcia y de su huerta. Como destaca Angel Luis Molina, excepto algunos rafales ó rahales musulmanes ya existentes y algunas parcelas nuevas que fueron inicialmente asignados por Alfonso X, la gran mayoría de estas tierras quedarán en propiedad del Concejo murciano como bienes de aprovechamiento común, en donde, inicialmente, se realizaba una economía pastoril y se cazaba con entera libertad. Desde finales del s. XIII el Concejo utilizará las tierras del campo como reserva para ir haciendo propietarios, por donaciones censales o a título gratuito, premiando así los servicios que se le prestaban. No obstante, la colonización y repoblamiento será un proceso muy lento que se desarrollará a lo largo de los siglos siguientes.

Imagen de Gea y Truyols

La primera mitad del s. XVI representa la etapa mas pródiga en repartos de tierras, avanzando los colonos sobre la llanura y extendiéndose hasta el Mar Menor. Esta colonización sigue realizándose, como resalta el citado Jimenez de Gregorio. a través de la construcción de caseríos, aunque no formando apretados núcleos de población como en otras regiones españolas, igualmente de secano, sino salpicando de viviendas labradoras toda la llanura. Cada parcela de tierra es una unidad económica completa, formada por la explotación del suelo y por el caserío que aloja todo el año a la familia labriega, contando en él con dependencias para el ganado, el grano y los aperos.

No será hasta bien entrado el s. XVIII cuando se inicie el nacimiento de los núcleos de población concentrada, como alternativa necesaria al poblamiento disperso. Hasta ese momento, y excepto Fuente Álamo y Los Alcázares, no existen núcleos urbanos. Incluso hacia finales del citado siglo los núcleos de población surgidos son muy pequeños, prueba de ello es que salvo Torre Pacheco y Fuente Álamo, que superan el millar de habitantes, el resto se mantiene entre 200 y 300 habitantes. En el año 1.772 queda constancia que de la diputación de Corvera dependían los caseríos de los Martínez, Campuzano , Balsa de Aledo, Baños y Mendigo, Partido de lo Jurado, Ventanas, Valladolises, Balsa Pintada, Lobosillo, Truyols y Doña Lucía ó San Antonio. Posteriormente, a partir de 1.785, dentro de la organización administrativa de Murcia se incluían Gea y Truyols como aldeas de realengo con alcalde pedáneo en cada una de ellas.

Imagen de Gea y Truyols

En los inicios del s. XIX, concretamente en el censo de 1.809, se cita a "Truyol y Gea" a la que se asigna una población de 264 habitantes. Con la llegada del denominado Trienio Liberal (1.820 - 1.823), se crearon gran cantidad de pequeños Ayuntamientos, entre ellos el de Sucina, cuyo territorio también lo conformaban las localidades de Balsicas, Cañadas de San Pedro, Gea y Truyols, Cabezo de la Plata y Jerónimo y Avileses. Esta situación se mantuvo durante poco tiempo dada la falta de capacidad económica y la lejanía de los pueblos asociados a la cabecera municipal. Como podemos observar ya comienza a utilizarse la denominación compuesta para referirse a la pedanía. En el año 1834. con motivo de la división territorial en juzgados de primera instancia , dentro del partido de Murcia, se incluye a Gea ó Truyols . También se tienen noticias, a través de los datos aportados por Pascual Madoz ,de que a mediados de siglo la diputación de "Gea y Trullors" pertenece al municipio de Murcia, aunque sigue dependiendo jurídica y eclesiásticamente, junto con "Abileses", parte de Balsicas y Cañadas de San Pedro , de la diputación de Sucina.

Entrados en el s. XX puede constatarse que, especialmente a partir de 1.960, el declive poblacional de la pedanía es muy importante. Así de los 1.071 habitantes de 1.960 se desciende a los 786 de 1.964, a los 506 de 1.970, a los 333 de 1.981y a los 332 de 1.991. En la última renovación padronal realizada en 1.986 se produce un leve aumento ya que figuran inscritos 412 vecinos. La mayor parte de esta población se concentra en el núcleo principal de La Tercia. Una gran parte de su población activa se dedica a las tareas agrícolas, tanto a los cultivos de secano (almendro y olivo) como a los de regadío (alcachofa, melón , lechuga), teniendo en la actualidad un gran auge los cultivos de invernadero que presentan unos excelentes resultados.